Pasamos la vida invirtiendo tiempo conociéndonos desde que nacemos hasta que somos adultas.
Durante la adolescencia nuestro cuerpo sufre muchos cambios y también estamos en la búsqueda de nuestra personalidad, pues los años anteriores vivimos la vida muy a través de los ojos de nuestros padres.
Cuando nos hacemos adultas logramos por fin establecer lo que nos gusta. La música, nuestro estilo para vestir, los libros que nos enganchan, el tipo de chicos con los que nos gusta salir o elegimos casarnos.
Descubrimos ya hace un rato nuestro cuerpo. Que tenemos partes sensibles donde nos gusta que nos toquen o no. Que hay partes de nuestro cuerpo que no nos gustan mucho porque “no son perfectas”, pero que hay otras que nos fascinan y siempre intentamos realzarlas, no sólo para que los demás disfruten visualmente de ellas, sino también por orgullo propio.
Nos gusta invertir tiempo en nosotras. En nuestra belleza, en nuestros conocimientos, en nuestros hobbies, en nuestro hogar, en nuestro cuerpo… ¿Y cuánto invertimos en nuestra salud? Digo, antes de estar enfermos, porque luego que ya lo estamos no nos queda de otra que invertir tiempo en recuperar nuestra salud, pero ¿Cuánto tiempo invertimos en prevenir enfermarnos? Muy poco ¿Cierto?
Yo no tengo mucha moral para juzgar a nadie. Tengo un vicio mortal con el que siempre ando batallando y que también podría evitarme muchas enfermedades: el cigarrillo. Pero no pierdo las esperanzas de ganarle la batalla antes que me la gane a mi.
El tema de hoy no tiene que ver con un vicio que te amarre o te enganche. Es simplemente crearse un hábito (UN BUEN HÁBITO) que sólo te lleva máximo 20 min (para las muy meticulosas) y es una vez al mes, y esto podría salvarte la vida.
Luchemos contra el Cáncer del Seno hoy y todos los días! Incluso una de mis nuevas niñas, Kelley (Pop Life Redhead) se unió a la campaña).
CUÍDATE
Información sobre nuestros senos:
Anatomía de la mama:
La mama contiene un número variable de lobulillos (entre 10 y 20) y otros tantos conductos excretores de leche que desembocan en el pezón.
Estos globulillos son los responsables de producir la leche materna.
Dividiendo el seno en cuatro
(Próximo a la axila)
Es en esta localización que tiene lugar la mayoría de los tumores malignos de la mama.
(Aproximadamente 50%)
¿Por qué debes examinar tus senos?
- Porque con el auto-examen aprenderás a conocer la estructura normal de tus senos y estarás capacitada para descubrir cualquier anomalía futura que pudiera aparecer.
- 95% de los casos de cáncer de mama pueden ser curados, siempre y cuando la enfermedad sea detectada en estadíos tempranos.
- Sociedades médicas nacionales e internacionales recomiendan que comiences a examinar tus senos a partir de los 20 años de edad. Se ha demostrado que una de cada diez mujeres podría presentar cáncer de mama en algún momento de su vida, siendo más frecuente en edades comprendidas entre 40 y 65 años.
¿Cuándo examinar tus senos?
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Debes examinar tus senos una vez al mes, así esta práctica llegará a convertirse en un hábito para ti.
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Al transcurrir una semana tras el inicio de la menstruación, para que la congestión fisiológica a la que se encuentra sometida la mama por el estimulo hormonal haya desaparecido. (Durante el período pre-menstrual las mamas suelen estar endurecidas y dolorosas).
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Si no tienes la menstruación por estar embarazada o por cualquier otro motivo debes elegir un día fijo de cada mes que sea fácil de recordar para ti.
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No olvides que el hombre también puede sufrir de cáncer de mama, aunque en un porcentaje mucho menor.
Sitúate frente a un espejo y observa tus senos, primero con los brazos colgando libremente, luego con las manos presionando la cintura (esta maniobra contrae el músculo pectoral) y finalmente elevándolos por encima de la cabeza.
Observa tus senos para detectar:
- Diferencias entre una y otra mama,
- Alteraciones en el tamaño, en la forma en el contorno de cada seno (bultos, durezas, retracciones del pezón.)
- También observa la piel para ver si presenta ulceración, eczema, etc.
- ¿Existe alguna alteración en la mama, modificación en la piel, o en los pezones?
Palpación A
Si vas a examinar la mama derecha primero debes colocar una pequeña almohada bajo el hombro derecho, a su vez el brazo de este lado debes elevarlo y situarlo detrás de la cabeza a nivel de la nuca.
Después, con los tres dedos centrales juntos y planos de la mano izquierda, realiza movimientos concéntricos o espirales alrededor de la mama, presionando suave pero firmemente con las yemas de los dedos y efectuando movimientos circulares en cada punto palpado, desde la periferia de la mama hasta el pezón, y en el sentido de las agujas del reloj.
Palpación B
Luego realiza movimientos verticales, para ello desplaza la mano para arriba y para abajo, cubriendo toda la mama.
Después, realiza los movimientos de cuadrantes, en los cuales la mano se desplaza desde el pezón, a la periferia de la mama y se regresa, hasta cubrir todo el seno.
Palpación C
Palpación D
SI PRESENTAS NÓDULOS, CUALQUIER SECRECIÓN PROVENIENTE DEL PEZÓN U OBSERVAS ALGUNA ALTERACIÓN DE LA PIEL DE LA MAMA O EL PEZÓN, NO TE ASUSTES PORQUE PUEDE SER UNA ALTERACIÓN BENIGNA, SIN EMBARGO DEBES ACUDIR INMEDIATAMENTE AL MEDICO PARA QUE TE ESTUDIE, TE ORIENTE SOBRE QUE ACCIONES TOMAR Y DISIPE TUS DUDAS.
Visita periódicamente a tu médico, además de hacer del autoexamen un hábito que también lo sea un chequeo médico preventivo de cualquier enfermedad.
La información sobre el autoexamen no fue escrita ni investigada por mi, fue copiada de una presentación power point enviada como cadena desde hace varios años, pero verificando información con otras fuentes, ésta cadena tiene información muy completa para mi sorpresa. No todas las cadenas de e-mails son basura.
